Veloso Motorsport es uno de los equipos con más historia en la Velocidad Ibérica, habiendo permanecido una fuerza competitiva durante treinta y tres años, lo que este año se tradujo en tres títulos, pero Luís Veloso todavía está decepcionado con la forma en que no pudo ver uno de sus coches luchar por el título de Pilotos GT4 Pro.
El equipo de Póvoa de Lanhoso afrontó este año la temporada del Campeonato Ibérico de Supercars: el conocido Audi R8 LMS GT4 de Jorge Rodrigues y Patrick Cunha, un flamante Porsche 718 Cayman GT4 de Miguel Lobo y Francisco Mora, y un Mercedes AMG GT4 compartido por Francisco Carvalho y Nuno Batista.
Los dos coches de la región de Stuttgart eran nuevos para el equipo dirigido por Luís Veloso, lo que provocó algunos contratiempos que repercutieron en los resultados. Aun así, el equipo portugués pudo celebrar tres títulos al final del año. “Tengo una visión positiva de 2024, ganamos tres títulos - el de Equipos del Campeonato de Portugal de Velocidade y el de Pilotos de la división de Bronze, tanto en la competición portuguesa como en la Supercars Ibérica, con Jorge (Rodrigues) y Patrick (Cunha)”, comenzó Luís Veloso, que continuó: “el nivel es muy alto, con buenos equipos y grandes pilotos, y eso añade valor a los logros. Sin embargo, ¡sabe a poco! Recibimos el Porsche justo antes del inicio de la temporada y no tuvimos tiempo de probarlo y prepararlo. Cuando empezamos a entender el coche siempre estuvimos en la lucha por el primer puesto, pero también tuvimos mala suerte con Miguel (Lobo), cuando éramos muy competitivos”.
En realidad, la llegada tardía del coche de Zuffenhausen marcó la temporada de Veloso Motorsport, ya que Luís Veloso considera que, en otras condiciones, Francisco Mora y Miguel Lobo, y más tarde Gonçalo Fernandes, podrían haber estado en la lucha por el título de GT4 Pro con César Machado y Jan Durán, en el Toyota GR Supra GT4 de Speedy Motorsport.
“¡El mayor desafío del año fue ser competitivos con el Porsche! Recibimos el coche en plena temporada y no tuvimos tiempo de probarlo y prepararlo adecuadamente. Los dos primeros eventos fueron básicamente sesiones de pruebas para poner el coche a punto. Luego tuvimos la mala suerte de que Miguel se lesionara en Valencia, cuando podíamos haber estado en la lucha por la victoria y habernos colocado en una posición favorable en el campeonato de pilotos. Fue una lástima. Con el Audi fuimos competitivos desde la primera carrera y siempre estuvimos en la lucha por los cinco primeros puestos de la clasificación general y por la victoria de división”, dijo el director del equipo de Póvoa de Lanhoso.
El título del Campeonato de Portugal de Velocidade por Equipos fue una conquista tensa debido a la alta competitividad del pelotón, con Veloso Motorsport llegando a la última carrera de la temporada, la segunda de la prueba de diciembre disputada en el Autódromo de Estoril, en lucha con Speedy Motorsport y Racar Motorsport, cualquiera de los cuales podría tener motivos para celebrar, dependiendo de las combinaciones de resultados de los dos coches nominados por cada uno de ellos.
Tal vez por eso, el Campeonato de Equipos del CPV conquistado a principios de este mes tenía un sabor diferente, a pesar de que el equipo Póvoa de Lanhoso existe desde hace treinta y tres años: “¡Todos los títulos son especiales! Este fue suis generis, porque lo ganamos en la última carrera, lo que compensa la mala suerte de la temporada, sobre todo con el Porsche, que llegó muy tarde y tuvo sus resultados afectados por el incidente con Miguel Lobo”, dijo el piloto de Veloso Motorsport.
Está claro que Luís Veloso lamenta los contratiempos sufridos por su equipo con el Porsche 718 Cayman GT4 inicialmente compartido por Miguel Lobo y Francisco Mora, siendo el piloto de Paços de Ferreira sustituido por Gonçalo Fernandes debido a su lesión.
El hombre fuerte considera que no tuvo las mismas oportunidades con el coche de Zuffenhausen que con el Audi R8 LMS GT4 compartido por Jorge Rodrigues y Patrick Cunha, que ganaron los títulos de pilotos de GT4 Bronze, pero deja una advertencia para 2025: “el objetivo es tener tres coches competitivos, para luchar por la victoria en cada carrera y por los títulos en los que estemos”.
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