Con la creciente competitividad de la parrilla del Iberian Supercars y Supercars Jarama RACE, cada detalle es importante, y las paradas en boxes son momentos que pueden definir las carreras.
Las carreras de este año se disputan al segundo, como ocurrió en el segundo desafío de Jerez, cuando, tras cuarenta y cinco minutos de competición, los tres primeros clasificados estaban separados por 1,126s y el segundo y tercer puesto estaban separados por sólo 0,003s, en un final de ‘photo finish’ en el que Miguel Lobo, en el Porsche 718 Cayman GT4 de Veloso Motorsport, se impuso a Nerea Martí, en el BMW M4 GT4 de BMW Motorsport España.
Con diferencias tan cortas que definen el triunfo de la derrota, cada segundo cuenta para el resultado final, siendo las paradas en boxes un momento crítico para todos los equipos en cada una de las carreras.
La ventana de cambio de piloto está abierta entre el minuto veinte y el último segundo del veintinueve, lo que da a los equipos cierta flexibilidad para jugar con el momento ideal para hacer la parada en boxes obligatoria.
Dos factores podrían entrar en la ecuación para que cada uno de los equipos llame a sus coches a boxes: el tráfico en la pista y si el piloto más rápido del dúo en cuestión está o no en el turno.
Con tantos coches en pista -había cuatro docenas en Jerez-, gestionar el tráfico puede ser decisivo para el resultado final. Estratégicamente, los equipos podrían adelantar una parada en boxes en un intento de evitar un grupo de coches al que se acerca su piloto, lo que podría costarles tiempo.
En la situación contraria, retrasar la parada puede ser más beneficioso, ya que el piloto en pista podría ganar tiempo a los rivales que tiene detrás, y su compañero de equipo podría adelantarlos tras pasar por boxes, lo que podría significar ascender en la clasificación o no perder tiempo con los que llegan tarde, dependiendo de la situación.
"El tráfico es un factor determinante en la decisión de cambiar de piloto. Una buena parada en boxes, en el momento adecuado, nos puede hacer ganar segundos importantes para un 'undercut' (n.d.r.: anticiparse a la parada para ganar posiciones). También es crucial en la lucha por las plazas en un pelotón de alto nivel, como es el caso este año en los Iberian Supercars ", dijo Nil Montserrat, jefe de equipo del NM Racing Team y también piloto de uno de los coches del equipo español.
Pero estos matices aún tienen que combinarse con el conductor al volante. La diferencia entre los pilotos de cada uno de los coches puede variar, pero en general, entre los dos siempre habrá uno que sea al menos ligeramente más rápido.
Este factor entra en la ecuación y, junto con los otros ya explicados, los equipos pueden decidir alargar un stint si es el piloto más rápido del coche, o adelantar la parada si es el menos rápido del dúo.
La estrategia es, por tanto, un proceso complejo que por sí solo puede marcar la diferencia entre el éxito y la decepción al final de la carrera, pero también está la cuestión operativa de las paradas en boxes.
La parada en boxes para cambiar de piloto debe durar 120 segundos (más las desventajas que reciben los tres primeros clasificados de la carrera anterior en cada división) desde el momento en que un coche determinado cruza la línea de entrada al pit lane hasta el momento en que corta la línea de salida.
Durante estos dos minutos, cada coche tiene que completar todo el pit-lane, parar, cambiar de piloto y arrancar. Si se practica bien el proceso, el tiempo es más que suficiente, pero la clave está en sobrepasar los 120 segundos lo menos posible -más handicap si es necesario- y volver a la pista sin perder, o incluso ganando, respecto a tus rivales.
Puede parecer sencillo a primera vista, pero para que una parada en boxes salga bien, los equipos tienen que empezar a contar la parada en el preciso momento en que el coche cruza la línea de entrada al pit lane y enviar el coche a la pista para que cruce la línea de salida del pit lane precisamente en el momento, o unas décimas más tarde, en que se completa el tiempo mínimo obligatorio de parada en boxes.
"Para cumplir los 120s, controlamos el ‘pit-timer’ (n.d.r.: dispositivo disponible en el Mercedes AMG GT4), que configuramos con el GPS. Para estar seguros, también controlamos con un cronómetro desde la primera sesión de entrenamientos libres. En la carrera, tenemos un mecánico en el pit lane para marcar el tiempo, de modo que podamos ser lo más precisos posible y también para disponer de un recurso de emergencia en caso de que falle el ‘pit timer’", explica Jaka Marinšek, jefe de equipo de Lema Racing.
Suena complicado, y de hecho lo es, entre otras cosas porque los equipos también tienen que gestionar el tráfico en el pit lane, donde los coches tienen que mantener una velocidad lo más estable posible, y hay una comunicación casi constante entre el piloto y su ingeniero de pista durante todo el proceso.
La comunicación, el proceso, la toma de decisiones y la capacidad de reacción son condiciones imperativas para que cada equipo maximice las oportunidades que presentan las paradas en boxes, bailando con el riesgo de una fuerte penalización en caso de no cumplir el tiempo mínimo de parada, aunque sea por 0,1s.
Al maximizar todos estos factores, se puede ganar o perder un tiempo crítico y, en carreras en las que los tres primeros puestos se han definido por menos de dos segundos, la diferencia entre la gloria y la decepción puede residir en la estrategia y la ejecución en torno a las paradas en boxes.
TOP 5 - PIT STOP MÁS RÁPIDOS EN JEREZ
1. Daniel Teixeira (JT59 Racing Team) +0.094
2. Salvador Tineo/Luis Gonzalez (Team VRT) +0.281
3. Guillermo Aso/Filip Vava (NM Racing Team) +0.517
4. Sérgio Azevedo/Orlando Batina (Batina Racing) +0.937
5. Smorg/Javier Macias (Promotion Motorsport) +1.056
Comments